La universidad es una institución que nació con un objetivo que sigue manteniendo a día de hoy, sea cual sea su naturaleza: otorgar a los jóvenes los conocimientos teóricos y prácticos necesarios para desempeñar una profesión especializada en el futuro.
En un principio estudiar en una universidad era algo elitista, reservado solo para hijos y familiares de monarcas, nobles o la burguesía con mayor poder adquisitivo. Hoy en día, si bien el ingreso a la universidad (sobre todo a algunas) no es gratuito. Se puede decir que existen muchas más probabilidades de acceder, sobre todo en los países desarrollados.
A pesar de que mantienen su objetivo primordial, es lógico pensar que las universidades han cambiado mucho a lo largo de los años. Esto es debido, sobre todo, a los cambios políticos, sociales o culturales, en los que muchas veces las propias universidades han tenido un papel capital. Y lo seguirán haciendo el futuro, a medida que los nuevos tiempos y las nuevas generaciones impongan su ley.
Tal y como avanzan las cosas, se podría decir que estas serán algunas de las características de las universidades del futuro.
No hace falta decir que la tecnología y la inversión en I+D será básica para las universidades de futuro. La tecnología no solo permite tener las mejores soluciones educativas y las herramientas más eficaces, sino que es imprescindible para que la universidad se mantenga a la cabeza de la innovación y para que sus alumnos puedan desplegar todo su talento y potencial. No todos los buenos proyectos necesitan de una tecnología avanzada, pero una tecnología avanzada ayuda a realizar buenos proyectos.
En la universidad del futuro los alumnos tendrán menos horas lectivas y estará más enfocada a las clases prácticas. Se imponen nuevos métodos de enseñanza, más orientada a proyectos y al emprendimiento.
La concepción clásica de la enseñanza cambia hacia métodos donde el alumno es más autónomo y eficiente.
Por ejemplo, el profesor deja audiolibros en la intranet. Los alumnos escuchan la lección en su casa. Una vez en clase se resuelven las dudas y se aplica la teoría a un supuesto práctico.
Será una universidad más global y democrática, en la que gente de cualquier parte podrá tener acceso al conocimiento. Es una tendencia que se viene dando en los últimos 5 años principalmente, gracias a instituciones como Coursera, que ofrece de forma gratuita en su portal los cursos de algunas de las universidades más prestigiosas del mundo, los llamados MOOC.
Asimismo, las universidades se tienen que adaptar a los nuevos métodos de formación ofreciendo a los alumnos las facilidades necesarias. En este sentido, cobran gran importancia las infraestructuras para permitir a los estudiantes diferentes tipos de formación, tanto presencial como online o híbrida, además de las plataformas necesarias para que la formación sea de calidad.
Las universidades del futuro estarán más ligadas que nunca a la innovación, la investigación de nuevas ideas y el nacimiento de empresas novedosas. No hay duda de que hoy en día las universidades son uno de los principales focos creativos (ahí está el ejemplo, entre muchos otros, del MIT, Harvard o Berkeley). Será una tendencia que aumente en el futuro, cuando el talento será cada vez más indispensable para destacar en el ámbito empresarial/profesional.