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Una persona lavándose el pelo

Te estás lavando mal el pelo y no lo sabías: los 7 errores que tienes que cambiar ya

Posiblemente, tú cometas más de uno de estos fallos

A todos nos preocupa nuestro pelo, en mayor o menor medida, y, por tanto, no dudamos en cuidarlo adecuadamente. De ahí que rápidamente pongamos remedio a su caída y que actuemos para ocultar las canas que van apareciendo. Y también, por supuesto, para que luzca limpio y radiante procedemos a lavarlo como corresponde.

Precisamente hoy queremos centrarnos en su lavado. Sí, queremos darte a conocer que hay varios errores que la mayoría de la población comete al realizar esta acción. Errores que pueden provocar que el cabello se vea dañado de forma innecesaria.

¿Preparado para tomar nota y dejar de caer en esos fallos? Te los enumeramos a continuación.

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Los principales errores con el champú

El champú, además del agua, es el producto imprescindible para eliminar toda la suciedad del pelo, conseguir que luzca limpio y que huela bien. Y a la hora de usarlo es muy habitual caer en varias equivocaciones.

El primero de los errores habituales es utilizar demasiada cantidad de champú, especialmente cuando se tiene el pelo largo. Esto supone que lo gastemos de forma innecesaria.

¿Cuánto emplear? Pues, según los expertos, es suficiente usar en cada lavado una cantidad correspondiente al tamaño de un garbanzo.

La segunda metedura de pata es considerar que si dicho producto no hace espuma es que es malo. Nada más lejos de la realidad. No tiene que ver nada su eficacia con que produzca aquella en mayor o menor cantidad.

Una persona que se está lavando el pelo con la alcachofa de la ducha en la mano
Muchas personas cometen estos errores | Getty Images

Asimismo, también es un error muy frecuente que, una vez que hemos aplicado y enjabonado bien la cabellera con el citado artículo, lo dejemos actuar mientras nos lavamos el cuerpo. Hay que tener muy presente que no requiere mantenerse así para que sea más efectivo. Es más, si se deja durante unos minutos y no se aclara, lo que se puede estar haciendo es perjudicar el cuero cabelludo.

De igual modo es un fallo enorme el aplicarlo y enjuagarlo con mucha prisa. Lo es porque posiblemente no se estén eliminando adecuadamente todos los restos de champú que hay. Esto va a suponer que, por tanto, el cabello no quede tan limpio como se desea y que puedan aparecer picores o problemas para desenredarlo.

Otros fallos que cometemos al lavarnos el pelo

¿Ya pensabas que no había más fallos? Pues hay otros errores muy frecuentes que cometemos al lavarnos el pelo.

Uno es el que realizan las personas que se pasan un buen rato frotando y frotando su pelo como si no hubiera un mañana. El hacer eso no garantiza que el resultado vaya a ser mejor. Frotar no es sinónimo de limpieza perfecta en este caso.

Otro es una 'leyenda urbana' que todos hemos aceptado, asimilado y aplicado. Nos estamos refiriendo a la creencia de que jamás hay que lavarse el pelo a diario porque este se ve dañado notablemente. Esto es falso, por lo que cada ciudadano podrá lavárselo las veces que quiera y especialmente si cuenta con un cabello graso.

Peluquero cortándole el pelo a una clienta
Para tener un pelo sano y bonito todo empieza en el lavado | Getty Images

El último de los errores que se cometen habitualmente es comprar el primer champú que se vea y que llame la atención por su olor o su precio.

Estos dos criterios son importantes y hay que tenerlos en consideración, pero hay que adquirir el que se ajuste a las características del cabello. Así, a la venta los hay para pelos con caspa, para teñidos, para secos, para los que tienen exceso de grasa...

Ojo, hay más meteduras de pata que cometen muchos ciudadanos. Entre ellas el dejarse aplicada la mascarilla más tiempo del indicado en el envase, el enjabonarse dos veces siempre o el no cepillarse el pelo antes de lavarlo.

Ahora que conoces todos estos fallos, está en tu mano dejar de caer en ellos y poder presumir de un cabello envidiable.