A lo largo de la historia siempre ha habido personas que han ido un paso por delante, que han sabido ver más allá y que se han convertido, gracias a sus descubrimientos, ideas o acciones, en personajes claves para la historia.
Si algo tienen en común la mayoría de estos personajes, claves para el desarrollo humano, es su respeto por la educación y la enseñanza. No todas las personas que triunfan en el mundo tienen estudios de alto grado, es cierto, pero de algún modo, han sabido ver la importancia de aprender y, también, de enseñar.
Porque los conocimientos que se adquieren, pero no se comunican a los demás, se terminan por perder. Así, la educación y el aprendizaje se convierten en un proceso circular, que se retroalimenta, y que nunca cesa. Es decir, tu aprendizaje dura toda la vida y, por supuesto, no termina cuando acabas los estudios.
Aquí puedes ver alguna de las frases más relevantes que han dicho sobre la educación personas muy conocidas e influyentes en la historia. Ellos llegaron a donde llegaron gracias a saber seguir aprendiendo constantemente.
«Dime y lo olvido; enséñame y lo recuerdo; involúcrame y lo aprendo».
Benjamin Franklin, además de ser un gran inventor, fue clave en la Independencia de Estados Unidos. Fue un hombre de teoría, sí, pero sobre todo de acción y de gran inteligencia práctica.
«Estudiar sin pensar es tan inútil como pensar sin estudiar».
El pensamiento oriental también está lleno de citas y enseñanzas acerca del aprendizaje. Por supuesto, una de las figuras más destacadas, Confucio, también hizo alusión en numerosas ocasiones a las bondades de educar a la gente.
«Nunca consideres el estudio como una obligación sino como una oportunidad para penetrar en el bello y maravilloso mundo del saber».
Todos sabemos, al menos a grandes rasgos, quién fue Albert Einstein, uno de los científicos más conocidos del siglo XX (sino el que más). Pues fue él quien dijo esta afirmación, además de otras como: «Yo no enseño a mis alumnos, solo les proporciono las herramientas necesarias para que puedan aprender».
«Solo es útil el conocimiento que nos ayuda a ser mejores».
Esta frase, pronunciada por Sócrates, es un claro ejemplo de la necesidad de ser selectivo en el aprendizaje. Más tarde, Erasmo de Rotterdam también afirmó que «No hay nada más estúpido que aprender aquello que luego se va a olvidar».
«Fuera del perro, un libro es probablemente el mejor amigo del hombre, y dentro del perro probablemente está demasiado oscuro para leer».
En clave del típico humor absurdo que caracterizó al genial Groucho Marx, esta frase contiene, en realidad, unas cuantas grandes verdades. Las primeras están claras. Un libro y un perro son dos de los mejores amigos del hombre. Y, por supuesto, tampoco se puede negar que, dentro del perro, estaría demasiado oscuro para leer.
«Aprender es como remar contracorriente: en cuanto se deja, se retrocede».
Edward Benjamin Britten, compositor, pianista y director de orquesta británico, fue quien dijo esta afirmación, muy cierta por otra parte. El aprendizaje es un proceso continuo que jamás termina. Hasta dónde lleguemos, depende de los que seamos capaces de remar.
«Lo poco que he aprendido carece de valor, comparado con lo que ignoro y no desespero en aprender».
Esta frase fue pronunciada por René Descartes, uno de los filósofos más destacados de la historia, y hace alusión a la permanente necesidad de saber que siempre hay objetivos y metas en el camino, nuevas cosas por aprender.