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Duérmete niño: El Método Estivill para dormir a tu bebé

Descubre el método que algunos apodan despectivamente como el de "dejar llorar al bebé"

A estas alturas no es ningún desconocido y sus métodos para dormir se han popularizado tanto que seguro, en alguna ocasión, cualquier padre o madre ha escuchado hablar del método Estivill. Para todos los que no conozcáis en qué consiste su sistema os recomendamos descubrirlo de la mano de su conocida obra “Duérmete niño”, el libro que a muchos padres les ha cambiado la vida.

“Duérmete niño”: El método Estivill para dormir a tu bebé

¿Qué padres no se han llegado a sentir impotentes en algún momento por no lograr dormir a su bebé y empezar a normalizar así los días tras la llegada al mundo de su hijo? De este modo es como “Duérmete niño”, el libro del método Estivill, llega a las librerías de todo el mundo, para revolucionar con sus propuestas las creencias acerca del descanso de los más pequeños.

El que es un auténtico best-seller entre las publicaciones disponibles en crianza  se ha convertido en uno de los métodos para dormir más seguidos por muchos papás y mamás a la hora de ayudar a conciliar el sueño de los más pequeños de forma doméstica.

Entre quienes han puesto en práctica el método Estivill de forma rigurosa y han tenido ocasión de dar su opinión, se estima que funciona en torno al 95% de los casos. Su apuesta es fuerte, pues no pretende ofrecer trucos para aplicar hasta acertar si más cuando los niños no consigan dormir. Lo que este famoso médico nos explica detalladamente en “Duérmete niño” es cómo llevar a cabo  un sistema que permita al bebé establecer el hábito del sueño, sin traumas y sin dependencias innecesarias.

¿Dejar llorar al bebé entre los métodos para dormir?

La ambiciosa propuesta del conocido como método Estivill consiste en lo que el doctor a quien debe su nombre llama “educar el sueño” del niño. Su sistema, basado en métodos conductistas, propone llevar al bebé a su propia habitación, estando aún despierto, y dejarlo solo  con la intención de que se duerma por sí mismo sin ayuda.

Cuando el pequeño reclame atención mediante el llanto, sus padres han de dejar pasar un minuto antes de volver a ir a su encuentro, pero en lugar de tomarlo en brazos o intentar consolarlo, durante un lapso de unos diez segundos le hablarán sin contacto físico y volverán a dejarlo a solas tanto si cesa como si no de llorar.

Método Estivill: ¿En qué consiste realmente?

El método Estivill propone unas tablas con tiempos de espera marcados específicamente para indicar el momento en que los padres pueden volver a acudir al encuentro de su bebé y conseguir así, paulatinamente, que el niño se acostumbre a regular por sí mismo el malestar de quedarse a solas hasta quedarse dormido.

Según cita textualmente el creador del método Estivill, "si seguís al pie de la letra las instrucciones, en siete días, como mucho, estaréis durmiendo todos de un tirón", quien considera que a partir del sexto mes de vida del niño, es necesario (¡y posible!) dormir sin las constantes atenciones de un adulto. Un objetivo ambicioso formulado de una forma capaz de cautivar a cualquier padre o madre afectado por la privación de sueño tan habitual en quienes tienen un bebé en casa.

Consecuencias de dormir poco en los niños

El método Estivill pretende evitar las consecuencias que conlleva para los niños el hecho de no descansar suficientemente, de la misma forma que otros métodos para dormir pretenden ofrecer soluciones a uno de los trastornos más habituales de la sociedad.

Parece obvio pensar que tener problemas a la hora de dormir acarreará a su vez problemas en el funcionamiento diario de cualquier persona. Pero teniendo en cuenta que es durante el descanso nocturno cuando el organismo se recupera, y que ciertos procesos solo tienen lugar durante las horas de sueño, en el caso de los más pequeños las consecuencias de dormir poco pueden ser incluso peores.

En los bebés se puede apreciar la facilidad con la que se ponen a llorar y lo irritables que pueden llegar a mostrarse en ocasiones, déficit de atención que podría mantenerse en etapas posteriores y perjudicar su aprendizaje.

En los niños podrían presentarse problemas de relación interpersonal, mal humor e incluso fracaso escolar, pero en el caso de cualquiera de nuestros hijos, sean de la edad que sean, dormir poco puede interferir negativamente en su propio crecimiento, así como fomentar trastornos en su correcto desarrollo. De ahí la importancia concedida por el método Estivill a dar con una solución a las alteraciones del sueño del bebé de forma definitiva.

Pero no nos olvidemos que, como padres, figuras esenciales en la crianza de nuestros hijos y completamente implicadas en su cuidado, las consecuencias de dormir poco en los niños también nos alcanzan a nosotros mismos, perjudicando también nuestra labor con relación a ellos: Además del inevitable agotamiento, puede surgir sentimiento de culpabilidad, inseguridades diversas, incluso llegar a generarse dinámicas de acusación mutua entre los dos miembros de la pareja, con el consecuente desgaste de la relación.

Si bien es cierto que no existe una única forma efectiva y válida de proceder en cuanto a los métodos para dormir habituales, conocer el método Estivil sí que ofrece unos planteamientos que pueden resultar enriquecedores para nuestro estilo propio a la hora de abordar los problemas de sueño de nuestros hijos.

En la crianza no existen normas estrictas ni únicas, se trata más bien de mantener una coherencia entre nuestros valores y objetivos y nuestra manera de proceder como padres. Y si para conseguir asentar un hábito saludable en nuestros pequeños, contamos con un método que funciona (por alguna razón) a un buen número de personas, ¿por qué no tenerlo presente y sacar de él aquello que pueda aportarnos una solución?