Es una realidad que los ciberfraudes cada día aumentan más y más. Ya apenas se estila eso de robar por la calle o atender un cajero para copiar los datos de una tarjeta. Ahora son más comunes los fraudes que se cometen a través de internet.
Es más difícil de pillar por parte de la policía y, por eso, son muchos los ciberdelincuentes que hay hoy en día. Si tienes un smartphone lo más seguro es que te haya llegado el típico SMS de un banco invitándote a entrar a un enlace y dar tus datos. Posiblemente, tampoco tengas cuenta en ese banco donde te dicen que ha surgido algún problema.
Este es uno de los delitos más frecuentes que hoy rondan por internet y a los que no hay que hacer ni caso. Simplemente borrarlos. Y en caso de que cliques en ellos, tendrás que ponerte en contacto lo más rápido posible con tu banco para que anulen tus tarjetas.
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Hoy venimos a hablar de otro ciberdelito que está ocurriendo mucho a través de WhatsApp. Se conoce que ya ha llegado a España y que algunas personas lo han sufrido, aunque, al principio, era más común en Latinoamérica.
Pues bien, el delito es sencillo y hay muchas personas que pican y hacen lo que la otra persona les manda. Te llega un WhatsApp de un número desconocido que no tienes añadido a la agenda.
Te saluda y te dice algo así como "Hola, mamá. Este es mi nuevo número de teléfono dado que el otro lo he perdido". Explica que su otro móvil lo ha perdido, se ha roto o se lo han robado, todo para justificar que tiene ese nuevo número de teléfono.
Cuando la madre en este caso le quiere llamar para ver qué ha pasado, la otra persona le dice que no le llame. Pues de nuevo le pone una excusa como que en ese momento solo puede hablar por WhatsApp o que tiene fastidiado el audio y tampoco puede hacer ni recibir llamadas.
Así, la otra parte continúa el juego por WhatsApp sin oírle la voz al ciberdelincuente. Después de esta conversación de inicio, la persona empieza su estrategia: quiere que le ingrese dinero a través del banco o por Bizum.
La otra persona no pone en duda en ningún momento que quien le está hablando a través de WhatsApp es su hijo. Entonces este le dice que está en un compromiso y que tiene que hacer unos pagos urgentes. Y puesto que se supone que perdió su móvil no puede hacerlo online.
Así que le pide sin mayores rodeos que, por favor, ingrese a una cuenta el dinero que él le pide, o, en su defecto, que le haga un Bizum a un número. Y la otra persona, como se piensa que su hijo está en apuros, se lo ingresa y no vuelve a saber nada más de él.
Como en todos los timos, siempre hay cosas que no cuadran del todo. Pues como son números aleatorios a los que hablan, puede ser que esa persona no tenga hijos, entonces no le cree.
Otra opción es que se intenten poner en contacto con su hijo por otra vía y este le diga que él no está haciendo nada. Y así, le advierta a la madre de que puede ser un timo.
No obstante, sí hay personas que ya han caído en este timo. Y la recuperación del dinero es, cuanto menos, complicada. Además, nadie te puede asegurar que vayas a recuperarlo.
Porque, una vez ingresado, viaja a través de varias cuentas con muchos destinatarios hasta que se le pierde el rastro real. Por lo que, si la cantidad es elevada, es una gran pérdida.